Las Islas Galápagos están en peligro

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06:13 La UNESCO agregó a las Islas Galápagos en la lista del Patrimonio Mundial en Peligro

En un comunicado, la organización indicó que es una medida adoptada para movilizar mayores recursos para su conservación. Las especies invasivas, el turismo creciente y la inmigración son las tres principales amenazas que tienen las islas ecuatorianas. También fue incluido el parque nacional Niokolo-Koba de Senegal.

El Comité del Patrimonio Mundial inscribió hoy a las islas Galápagos (Ecuador) y el parque nacional Niokolo-Koba (Senegal) en la Lista del Patrimonio en Peligro, con vistas a movilizar así mayores recursos para su conservación, según informó hoy la UNESCO en un comunicado.

El Comité del Patrimonio Mundial celebra su 31ª reunión en Christchurh (Nueva Zelanda) y procede en ella a la revisión del estado de conservación de los 830 sitios que conforman la Lista del Patrimonio Mundial.

Situadas en el Océano Pacífico a 1.000 km de las costas de Sudamérica, las 19 islas del archipiélago de las Galápagos y la reserva marina que las rodea son un museo vivo único y un lugar incomparable para estudiar la evolución.

"Este aumento trajo consigo mayor inmigración, en tanto que el tráfico de personas entre las islas es la causa de la introducción de especies invasivas", agregó.

Por su parte, el parque nacional Niokolo-Koba, inscrito en la Lista del Patrimonio Mundial en 1981, está situado a orillas del río Gambia. Los bosques de sabana del parque son hábitat de abundante fauna, que incluye ejemplares del mayor antílope del mundo (Taurotragus derbianus), chimpancés, leones, leopardos y una gran población de elefantes, así como aves, reptiles y anfibios.

(http://www.clarin.com/diario/2007/06/26/um/m-01445651.htm)

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Cada día, el Secretario de la Lista del Patrimonio Mundial, repasa la situación de los 830 sitios que conforman la lista.

Pero los sitios no se conforman: exigen mejoras, reparaciones, terapia intensiva.

“Tenemos varios problemas importantes que ponen en riesgo la conservación de la vida en las islas”, dice el secretario sacando la punta del lápiz con el que anota las altas y las bajas de la lista.

Con el turismo y la inmigración animal no hay problemas: de golpe un pingüino, alguna ballena o ciertos mosquitos van de visita, pasean por allí, se hacen amigos de los pinzones y las tortugas y, por lo general se van, no sin antes invitar a los anfitriones para el año próximo en la Patagonia.

Incluso, los animales de Galápagos han firmado un convenio con los de Niokolo-Koba (Senegal) para visitarse mutuamente sin restricciones.

Es más: habitualmente existen romances entre ellos, entonces el visitante se queda para siempre y a nadie le parece raro, salvo a la Unesco.

Sólo que las tortugas no miran las cosas igual: dicen que “el tráfico de personas entre las islas es la causa de la introducción de especies invasivas y destructivas por naturaleza como los humanos ", agregan desesperadas.

“Darwin nos cayó simpático y lo dejamos, al tiempo que le arreglamos las islas para que descubriera algo tan evidente que cualquier mosquito se daría cuenta”, dicen.

La Secretaria General de la Asamblea de Tortugas de Galápagos (SEGETORGA), expresó su preocupación sobre estos temas durante una extensa conferencia de prensa.

Dijo que: “Es incomprensible lo que pasa con esta variedad de mamíferos. Algunos vienen con buenos planes para ayudarnos pero se callan cuando aparecen los de Turismo, que nos llenan la isla de edificios y gente que sólo se van felices si se llevan algo de recuerdo. Al final decidimos fabricar nosotras los souvenirs y dejarlos tirados en la playa: ¡y se la creen!”.

“Son demasiado contradictorios”, sigue la Secretaria, “los de la UNESCO lloran con nosotras y nos palmean el caparazón. Se preocupan por alguna otra especie diferente que pueda quedarse aquí, pero se inclinan ante palabras como Desarrollo, Producción y Saldo Positivo. La consecuencia es que aquí viene cada vez más gente disfrazada de ecologista y nos están matando”.

Y agrega que: “Estamos muy preocupadas por su salud mental: no sabemos si están locos o son locos. Nosotras somos lentas, pero estos parecen idiotas de nacimiento. Además hay algo raro que nos une y nos diferencia: nosotras tenemos la caparazón por afuera, pero ellos la tienen por adentro”, reflexiona, antes de darse un chapuzón en el mar y perderse en el Tiempo.